top of page
  • StereoFlare

EL EGO, el “YO” exterior

Cuando era muy pequeña mis padres se separaron y no pude vivir más con mi padre, entonces lo veía esporádicamente. Pero desde que nací recuerdo a mi padre como siempre ha sido físicamente hasta la actualidad, él es un hombre que siempre ha llevado el cabello rapado completamente, y siempre me pregunté el ¿por qué no se dejaba el cabello un poco más largo? Porque yo sabía que él podía tener otra apariencia, otro estilo en su cabello que siempre ha sido abundante. Un día le pregunté: ¿Por qué no te dejas el cabello un poco más largo para que tengas otra apariencia?, y su respuesta fue: Porque yo no me identifico con eso.


Cuando escuché esto, él notó mi expresión de sorpresa y extrañez, porque aún no entendía lo que me había dicho, era tan profunda la respuesta y a la vez tan simple que lo fui entendiendo poco a poco con el tiempo, mi padre lo que quiso decirme es que no se identificaba con el Ego.


El Ego es ese YO que todos tenemos y que de alguna u otra manera sabotea nuestro verdadero ser, debido a que estamos rodeados de mucha información que confunde nuestra verdadera esencia. Todo lo que somos por fuera, la forma en que nos peinamos, vestimos y adornamos nuestro cuerpo, es el Ego en su máxima expresión, pero sucede que todo eso que mostramos no es realmente lo que somos, es una construcción falsa que hacemos de nosotros mismo gracias a nuestra mente que desea sentirse importante, ser mejor que el otro o la otra, o ser más bella o bello que el otro, el ego quiere ganar siempre, destacar sobre los demás. Resulta que estas prácticas de vaciedad nos alejan de nuestro espíritu que es diferente a lo que mostramos, convirtiéndonos en seres egoístas, egocéntricos y banales.


Las redes sociales confunden mucho más a las personas, haciéndolas creer que son “eso” que muestran, pero eso es solo un grano de arena de un gran mar que todos llevamos por dentro. Cada vez que alimentas tu ego, tu esencia se dispersa, y comienzan las tristezas y la desesperación del ser por querer destacar, y resulta que cada ser humano tiene mucho más que dar y descubrir que la simple apariencia física hacia el mundo exterior.



Después de leer esto, seguramente te viene la pregunta que nos hacemos todos cuando descubrimos ésto, ¿Cómo elimino mi ego? Resulta que no se puede eliminar, debes aprender a vivir con él, y para poder trascenderlo requiere de valentía y coraje para contigo mismo. Aceptarte tal cual eres es el primer paso para poder dominarlo, olvidarte de las aprobaciones de los demás, dejar de querer ganar o inclusive exhibirse para llamar la atención de todos. Al principio te va a doler, te va a doler tanto que no entenderás el por qué de ese dolor, y cuando sepas entenderte y quererte como te creó el universo, sin querer cambiar la forma de tu nariz o el tamaño de tus tetas, ahí comenzarás un largo viaje al centro de tu ser, donde te sentirás más pleno contigo mismo, sin esa voz manipuladora mental que te diga del qué dirán los demás, quién te aprueba o no, o que tan hermoso o hermosa eres comparativamente hablando.


Si quieres conocer la verdadera esencia del ser, comienza por aprobarte primero tú, aceptarte, sin competencias ni falsedades, comienza a hacer ese trabajo interno que es una materia ardua que todo ser humano debería de recorrer. Recuerda que hay que darle importancia a nuestra totalidad para encontrar la verdadera joya que habita en nuestro interior.





64 visualizaciones

Entradas Recientes

Ver todo

WHIP IT

bottom of page